Cambridge, MA-Lostrabajadores de la limpieza y el mantenimiento de los edificios e instalaciones de la Universidad de Harvard han llegado a un acuerdo provisional de cuatro años una hora después de la expiración del contrato. El acuerdo, sujeto a la ratificación de los miembros, prevé un aumento salarial del 12,5% durante la vigencia del contrato y garantiza la asistencia sanitaria pagada por el empleador. Los conserjes ganarán 24,67 dólares la hora al final del contrato. El acuerdo también incluye un lenguaje para promover el trabajo a tiempo completo en una universidad en la que casi el 30% de los conserjes siguen trabajando a tiempo parcial.
"Cuando los hombres y mujeres que trabajan duro consiguen buenos empleos con salarios y beneficios decentes, es una victoria para las familias, las comunidades, los empleadores y la economía en su conjunto", dijo Roxana Rivera, Vicepresidenta de la 32BJ SEIU. "Los trabajadores de los servicios están legítimamente orgullosos del trabajo que realizan y están decididos a que estos puestos de trabajo sigan siendo fuertes, con buenos salarios y beneficios que creen una entrada en la clase media".
El viernes 7 de octubre comenzaron las negociaciones para un contrato plurianual entre la Universidad de Harvard y el 32BJ SEIU, el mayor sindicato de servicios inmobiliarios del país. El contrato cubre a más de 700 conserjes que mantienen los edificios de los campus de Harvard en Cambridge y Boston.
Con una dotación de 34.000 millones de dólares, la Universidad de Harvard tiene sin duda los medios para seguir ofreciendo buenos empleos a los bostonianos trabajadores que hacen de Harvard una gran universidad. Según los estados financieros más recientes de Harvard (año fiscal 2015), la universidad cuenta con 4.000 millones de dólares de activos netos no restringidos en su Cuenta General de Operaciones, y más de 10.000 millones incluyendo los fondos de dotación no restringidos. En conjunto, los activos netos totales atribuibles a la universidad alcanzaron los 44.600 millones de dólares. El terreno, los edificios y el equipamiento tienen un valor de otros 6.200 millones de dólares.
Los costes siguen aumentando en el área de Boston. Desde 1990, el coste de la vida ha aumentado un 68%, lo que convierte a Boston en la décima ciudad más cara de Estados Unidos. Aunque la ciudad salió de la Gran Recesión en mucha mejor forma que otras grandes metrópolis, no todos nuestros residentes han podido compartir la prosperidad que ayudaron a crear. Cada vez es más difícil vivir y trabajar en un empleo de clase media y poder permitirse vivir aquí.
Con más de 155.000 afiliados en 11 estados y Washington DC, incluidos 18.000 afiliados en el área de Boston, el 32BJ es el mayor sindicato de trabajadores de servicios inmobiliarios del país.