Los agentes de seguridad del aeropuerto JFK de Nueva York han votado hoy ir a la huelga si los contratistas siguen intentando silenciarlos para que no se quejen de los problemas de seguridad de pasajeros y trabajadores.

Los vigilantes de seguridad, que están formando una organización sindical para luchar contra la supresión de sus derechos, han fijado una huelga para el jueves 20 de diciembre si las empresas no responden.

Prince Jackson dijo que los agentes de seguridad del aeropuerto JFK como él preferirían no hacer huelga, pero Air Serv no les deja otra opción.

"Nos manifestamos porque no se nos proporcionan las herramientas básicas que necesitamos para mantener la seguridad de los pasajeros en el aeropuerto. Estamos entre la espada y la pared porque Air Serv nos dice que nos callemos. Que no hablemos de lo mal que van las cosas. Incluso a nuestros compañeros de trabajo".

Otro grupo de vigilantes de seguridad, 100 trabajadores de Global Elite, votarán mañana para autorizar una huelga.

Funcionarios electos de Nueva York, líderes religiosos y sus propios empleados han instado a Air Serv y Global Elite a encontrar una solución que aborde los problemas de seguridad planteados por los funcionarios y afirme el derecho de los trabajadores aeroportuarios a plantear cuestiones de seguridad pública que les afecten a ellos, a otros miembros del personal del aeropuerto y a los pasajeros.

El presidente del distrito de Manhattan, Scott Stringer, los senadores estatales Toby Ann Stavisky y Joseph P. Addabbo, Jr., y el jefe adjunto de la mayoría del Ayuntamiento de Nueva York, Leroy Comrie, son algunos de los doce cargos electos que han apoyado los esfuerzos de los agentes por corregir los problemas de seguridad.

"La seguridad de los viajeros es muy importante para mí", dijo Shah Rahman, agente de seguridad de Air Serv. "Por eso mis compañeros y yo hemos contado a Air Serv los problemas que hemos encontrado en el trabajo. Hemos presentado peticiones. Air Serv, en cambio, intenta silenciarnos. Nos negamos a que nos amenacen. No nos silenciarán".

Las acciones de los trabajadores se producen poco después de que otros trabajadores con salarios bajos se organizaran en restaurantes de comida rápida, lavaderos de coches, supermercados y otras industrias con salarios bajos. Sólo en Nueva York, los trabajadores de la comida rápida organizaron una huelga de un día hace dos semanas, los trabajadores de un lavadero de coches del Bronx se han declarado en huelga y los empleados de otros cuatro lavaderos de coches han votado a favor de afiliarse a un sindicato.

"Desde los trabajadores de la comida rápida a los de los aeropuertos, los trabajadores mal pagados están alzando por fin su voz contra el trato indigno y los bajos salarios, y muchos de nosotros en las comunidades religiosas estamos con ellos", dijo el apóstol Leeds, de las Iglesias Unidas para Salvar y Sanar (CUSH).

Con más de 125.000 afiliados en ocho estados y Washington, D.C., incluidos 70.000 afiliados en Nueva York, el 32BJ SEIU es el mayor sindicato de trabajadores de servicios inmobiliarios del país y el mayor sindicato del sector privado de los estados.

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