QUEENS, NUEVA YORK (26 de junio de 2014) - Cientos de trabajadores aeroportuarios enardecidos -cantando "Contrato ya" y ondeando pancartas y carteles- celebraron hoy una emotiva concentración en los terrenos del aeropuerto de La Guardia para dar el pistoletazo de salida a una campaña de 100 días para conseguir un salario justo, prestaciones, un buen contrato sindical y justicia económica.

Los trabajadores, a los que se unieron cargos electos, el presidente de la 32BJ SEIU, Héctor Figueroa, miembros del clero, defensores y simpatizantes de la comunidad, instaron a las principales compañías aéreas y a sus subcontratistas a cumplir el mandato del director ejecutivo de la Autoridad Portuaria, Pat Foye, de aumentar inmediatamente los salarios y desarrollar un plan global a largo plazo para ofrecer buenas prestaciones y un trato justo a los 12.000 trabajadores contratados en los aeropuertos de La Guardia, JFK y Newark.

"Estamos aquí para decir a las compañías aéreas ricas y a sus contratistas que pagan salarios de miseria que ya es hora de que empiecen a pagaros un salario justo, con prestaciones y un camino hacia la clase media", dijo Figueroa a los trabajadores. "Trabajáis duro y merecéis un buen contrato sindical y el derecho a tener los mismos salarios y beneficios que la gente que trabaja directamente para el Puerto. Mismo trabajo, mismo salario".

La concentración marcó el inicio oficial de los 100 días de acción, en los que los trabajadores presionarán a los contratistas que se muestran reticentes y llevarán su lucha directamente a las aerolíneas. La cuenta atrás es hasta el 30 de septiembre de 2014, fecha límite para el plan de la Autoridad Portuaria de mejorar los salarios y las prestaciones, incluida la atención sanitaria.

Entre los asistentes que apoyaban a los trabajadores se encontraban: El diputado Charles Rangel, los senadores Toby Ann Stavisky y Martin Dilan, Hazel Dukes, presidenta de la Conferencia Estatal de Nueva York de la NAACP, el reverendo Willie D. Francois III, de la Primera Iglesia Bautista Corintia de Harlem.

"Estoy aquí hoy y estaré aquí hasta que ganemos", dijo el congresista Rangel. "La clase media está siendo exprimida. La gente no puede permitirse pagar el alquiler o la matrícula de sus hijos. No podemos permitirnos que los trabajadores sean empujados a la pobreza después de trabajar duro todo el día."

Los trabajadores piden a los contratistas y a las aerolíneas que cumplan de inmediato el mandato de la Autoridad Portuaria y se limitan a solicitar el mismo conjunto de condiciones de que disfrutan los contratados directamente con el Puerto: un salario de subsistencia familiar, asistencia sanitaria, días de baja por enfermedad pagados y voz en el lugar de trabajo. El mes pasado, miles de trabajadores del aeropuerto votaron abrumadoramente a favor de designar al 32BJ SEIU como su sindicato y de negociar en su nombre.

"El^{30 de} septiembre vence el plazo del plan de la Autoridad Portuaria para mejorar los salarios y las prestaciones, incluida la asistencia sanitaria, y estamos avisando a los contratistas y a la compañía aérea de que deben cumplir el mandato de la Autoridad Portuaria", declaró Nelly Escobar, limpiadora de cabinas en el aeropuerto JFK. "Trabajamos muchas horas y apenas podemos alimentarnos y alimentar a nuestras familias. Eso no está bien".

Gian López, manipulador de equipajes en LaGuardia, dijo que es una lucha llegar a fin de mes con salarios de miseria, y añadió que las acciones continuarán hasta que la Autoridad Portuaria obligue a las aerolíneas a cumplir la nueva normativa de Foye.

"No es la última vez que nos verán", dijo López. "Necesitamos un contrato sindical que nos dé un trato justo y una voz fuerte".

"Un salario justo, buenas prestaciones y justicia laboral son cuestiones de derechos civiles", afirmó Hazel Dukes, presidenta de la Conferencia Estatal de Nueva York de la NAACP. "Hace cuarenta y seis años, el Dr. Martin Luther King dijo que era 'criminal' que la gente recibiera un salario a tiempo parcial por un trabajo a tiempo completo. Hoy sigue siendo criminal.

"Nuestros aeropuertos son puertas de entrada. Durante siete días a la semana, 24 horas al día, personas de todo el mundo llegan a la ciudad de Nueva York para hacer negocios, visitarla y volver a casa", ha declarado el senador Martin Malavé Dilan. "Es un motor económico vital para nuestra ciudad y nuestro estado, y, en el centro del cual, por desgracia, hay una mano de obra muy mal pagada. A medida que buscamos modernizar nuestra infraestructura aeroportuaria y mejorar los servicios, debemos reconocer que cualquier aeropuerto es tan bueno como su personal de apoyo. Es hora de que su salario refleje su duro trabajo y dedicación".

El senador estatal Stavisky dijo"Estoy orgulloso de estar hoy aquí con miles de trabajadores de aeropuertos y 32BJ SEIU para exigir un contrato que compense a los trabajadores de manera justa y humana. Es inconcebible que los trabajadores de los aeropuertos que sirven a la ciudad más grande del mundo no reciban asistencia sanitaria, tiempo libre o, en algunos casos, ni siquiera el salario mínimo. Es hora de que estos trabajadores reciban la dignidad de un contrato justo".

La concejala Julissa Ferreras, presidenta de la Comisión de Finanzas, envió una declaración de apoyo.

"Como representante del 21º Distrito del Consejo en Queens, que incluye el aeropuerto de LaGuardia, me enorgullece solidarizarme con la 32BJ y los cientos de trabajadores del aeropuerto que exigen un contrato justo", dijo Ferreras. "Nuestros trabajadores de clase media están en el corazón de la economía de nuestra ciudad, y estos trabajadores no deberían tener que luchar por la justicia, el respeto y una voz en sus lugares de trabajo. Ha llegado el momento de un contrato que respete y el duro trabajo de todos los trabajadores del aeropuerto."

Con más de 145.000 afiliados, la 32BJ SEIU es el mayor sindicato de servicios inmobiliarios del país.